Igualm las relaciones sobre adolescentes asi­ como jovenes, concretan que nunca hay la reparto sobre conseguir correcta asi­ como ello favoreceria la bidereccionalidad (roles de agresion desplazandolo hacia el pelo victimizacion) falto darse tasas simetricas para las diversos clases de violencia ( Ferrer-Perez amp; Bosch, 2019 ; Lopez-Ossorio, et al., 2018 ).

La consideracion de ambos miembros de la pareja como agresores y no ha transpirado victimas ha producto harto controvertida, apreciandose posiciones excesivamente enfrentadas entre si. Las investigadores de conflictos parientes han entendido que tanto varones como chicas pueden comportarse como victimas asi­ como agresores de las variados tipologias de crueldad; por opuesto, las investigadores feministas, igual que se les denomina en algunas ocasiones, basan su argumentacion en que son las chicas las unicas victimas sobre esta clase sobre abuso ( Archer, 2000 ; Dobash amp; Dobash, 2004 ; Ferrer-Perez amp; Bosch, 2019 ; Hanson, 2000 ; Nowinski amp; Bowen, 2012 ; Rivera-Rivera et al., 2007 ). Estas dos corrientes han recibido abundancia de criticas que han suscitado un intenso debate asi­ como el surgimiento sobre posiciones encontradas en la explicacion de las particularidades, que defienden cada la de las posturas: asi se han establecido nuevas tipologias sobre brutalidad sobre pareja ( Brownridge, 2010 ; Dobash amp; Dobash http://www.datingranking.net/es/jdate-review/, 2004 ; Johnson, 2006 ; Juarros-Basterretxea, Herrero, Fernandez-Suarez, Perez amp; Rodriguez-Diaz, 2018 ), se han recabado nuevos datos ( O’Leary, 2000 ; Rusell amp; Oswald, 2002 ; Straus, 2006 ; Straus, 2008 ; Rubio-Garay, Lopez-Gonzalez, Saul amp; Sanchez-Elvira, 2012 ; Grana amp; Cuenca, 2014 ) desplazandolo hacia el pelo la variedad sobre explicaciones en las motivaciones de las intervinientes ( Graham-Kevan, amp; Archer, 2005 ; Munoz-Rivas et al., 2007 ; Straus, 2008 ), para favorecer a la clarificacion del fenomeno de la bidireccionalidad en la furor sobre pareja ( Straus, 2016 ).

Pese al debate, investigadores como Hamby (2015) han tratado de indagar el engendro desde un momento de vista mas global, senalando que una de estas principales motivos en la discrepancia sobre objetivos da la impresion acontecer la forma en que las investigadores redactan los items que componen los cuestionarios utilizados para valorar la violencia. Esta discrepancia desplazandolo hacia el pelo falta sobre adecuacion en el modo sobre expresion y el contenido de las items podria estar ampliamente ligada a la discrepancia en las tasas de brutalidad obtenidas, es decir, se han encontrado dificultades en el establecimiento sobre un sistema apropiado para recoger de maneras fiable el testimonio de la pareja ( Lopez-Cepero, Rodriguez-Franco, amp; Rodriguez-Diaz, 2015 ). De dar respuesta an ello, Armstrong, Wernke, Lisdahl, amp; Schafer (2002) han propuesto dos estrategias: 1. El metodo por representacion, en donde la documentacion se obtiene referente a la ocurrencia de actos violentos a traves de la recogida del testimonio de uno de los miembros de la pareja escogido al azar, tomandolo como representacion del testimonio sobre la una diferente pieza; 2. adquisicion sobre la referencia de ambos miembros, a donde se evalua las niveles en sintonia dentro de ellos. Este ultimo sistema se ha ejecutado sobre dos maneras distintas: Considerando el limite inferior de la estimacion sobre prevalencia, es decir, atendiendo al testimonio sobre ambos miembros sobre la pareja cuando las 2 reportan un acontecimiento violento, entretanto que la informacion que aporta individuo solo de las miembros seri­a menospreciada; margen superior o estimacion de la prevalencia que atiende a cualquier evento violento narrado por Algunos de los miembros, sea o no corroborado por la pareja.

Asumidas las criticas al sistema por representacion y la sugerencia de la reservada de referencia a traves de los dos miembros de la pareja ( Armstrong et al., 2002 ; Renner, Schwab, Peeksa, amp; Ramirez, 2015 ), las resultados relativos a la concordancia en el discurso sobre los dos miembros desvelan que existe un gran grado sobre desacuerdo—con valores entre escaso y no ha transpirado moderada fiabilidad—entre los testimonios sobre los miembros de la pareja sobre la ocurrencia y la frecuencia de la violencia. Las parejas tienden a presentar acuerdo con la “no ocurrencia sobre la violencia”, pero nunca sucede igual en el caso sobre la “ocurrencia” de esta ( Armstrong et al., 2002 ; Chan, 2012 ; Strandmoen, Rangul, Tjersland, Wentzel-Larsen, amp; Heir, 2016 ): las mujeres, a su vez, tienden a indicar niveles mas altos de furor que las varones, de manera que el consenso parece verse afectado en mision del genero ( Armstrong et al., 2002 ; Strandmoen et al., 2016 ); la violencia psicologica fue indicada con gran repeticion por ambos miembros sobre la pareja cara a otros clases sobre furor ( Chan, 2012 ; Strandmoen et al., 2016 ). Renner et al. (2015) , en zonas rurales, se han visto que la furor fisica ejercida por el macho seri­a percibida por las chicas de forma mas clara sobre lo que las varones llegaron a reconocerla; por el opuesto, en la salvajismo ejercida por la mujer hacia el varon se observo el patron inverso en este tipo sobre brutalidad.

Considerando los antecedentes anteriores, se plantea igual que objetivo comprobar la prevalencia de sucesos violentos en la pareja asi­ como indagar las niveles sobre concordancia en la ocurrencia sobre la furor durante el cortejo. En base a la literatura previa, se hipotetiza la alta prevalencia de brutalidad sobre clase psicologico—desapego, humillacion desplazandolo hacia el pelo coercion—no estando tan altos en las restantes—fisico desplazandolo hacia el pelo sexual— (Hipotesis 1) asi­ como niveles en sintonia sobrio en la pareja con respecto a la ocurrencia sobre todos estos clases sobre violencia (Hipotesis 2), esperando hallar niveles superiores de acuerdo en la frecuencia de sucesos violentos de tipo corporal y sexual, No obstante bajos niveles en lo que respecta a la brutalidad psicologica (Hipotesis 3).

La muestra de participante en el analisis se conforma como consecuencia de un muestreo nunca probabilistico por conveniencia.

En la seleccion de la muestra se asegura la confidencialidad en las datos recogidos, debido a que Igualmente sobre nunca incluirse datos personales en los cuestionarios no se solicito ninguna referencia que los pudiera identificar. El juicio de insercion fue seleccionar parejas heterosexuales con edades comprendidas entre las 18 y 30 anos de vida que mantuviesen la relacion de relaciones sobre, aunque sea, un mes de duracion.

La muestra estuvo compuesta por 106 parejas que en la ocasion actual mantenian una conexion de cortejo. La perduracion media de estas chicas participantes fue de 22.18 anos de vida (sobre = 3.27), mientras que en su pareja varon fue de 23.79 anos de vida (sobre = 4.58). El nivel sobre estudios sobre las participantes sobre la muestra fue agrupado en: estudios preuniversitarios (28.8%; 16.8% de las mujeres, 41% de los varones) desplazandolo hacia el pelo estudios universitarios (71.2%; 83.2% de las hembras, 59% de las varones). El grado sobre beneficios del circulo familiar de las participantes en la muestra fue: beneficios mensuales inferiores a 900€ (6.1%; 6% de estas mujeres, 6% de los varones), dentro de 900 asi­ como 2500€ (41.7%; 38% de las chicas, 34.5% sobre las varones) y por encima de 2500€ (52.2%; 56% de las hembras, 59.5% sobre las varones).